Domingo 27 de mayo de
2012
DOMINGO DE PENTECOSTÉS - Ciclo B
ENTRADA: Llegamos a Pentecostés, fiesta de la siega en la que los judíos recordaban el pacto de
Dios con el pueblo en el monte Sinaí, «cincuenta días» (=«Pentecostés»)
después de la salida de Egipto, de la Pascua. Hoy vamos a recoger el fruto de
la siembra del Maestro: una nueva humanidad, recreada por la venida del
Espíritu que se describe acompañada de sucesos, expresados como si se tratara
de fenómenos sensibles que manifiestan que este Espíritu de Dios no es Espíritu
de monotonía o de uniformidad: es políglota, polifónico, es Espíritu de vida y
vida en abundancia, de concertación que inaugura una Iglesia lejos de
uniformidades malsanas, un Iglesia compuesta por una humanidad nueva, recreada,
cuerpo de Cristo, plural, pero acorde. Todos
de pie para que, unidos en la diversidad, iniciemos nuestra celebración como Iglesia
integrada por esa humanidad recreada, que canta con alegría.